Ficha:
- Título original: Batman: The Long Halloween
- Año: 1996-1997
- Guión: Jeph Loeb
- Dibujo: Tim Sale
- Tomos: 1-13
"Creo en Harvey Dent"
Batman lo cambió todo. Lo que antes era una ciudad atormentada por el crimen
y la corrupción ahora estaba empezando a despertar de la pesadilla. Un hombre
solitario, ataviado como un murciélago, estaba brindando a Gotham
City la oportunidad de creer que todavía quedaba esperanza...
Y así como Batman alteró los cimientos criminales de Gotham, Frank Miller hizo lo propio en 1986
cuando narró como un Bruce ya en su
vejez bestia por última vez el manto del murciélago. El regreso del caballero oscuro
supuso un punto de inflexión tanto en el mundo del comic como en el universo de
Batman, que fue completamente reestructurado tras la Crisis en tierras infinitas de DC. Ese reinicio, que tendría por
nombre Batman: Año uno, renarró los orígenes del hombre murciélago y
creó un nuevo modo de entender al personaje, más serio, más realista, más
oscuro… mucho más apartado de la comicidad que tenían sus primeros comics. Es
así como nace el Batman que hoy en día todos conocemos.
Fue en 1996, nueve años después del lanzamiento de Año uno, cuando se volvió a reunir el que muy posiblemente sea el mejor tándem escritor-dibujante que
ha tenido el placer de narrar las aventuras del murciélago: Jeph Loeb y Tim Sale. Este dúo ya había trabajado junto años antes en el
universo de Bats realizando tres especiales de Halloween entre el 93 y el 95 de
la colección Leyendas de Batman (Legends of the Dark Knight). Dichas
historias cortas, tituladas Miedos, Locura y Fantasmas, fueron recopiladas en la edición Batman: Haunted Knight de la que hablaremos en un futuro no muy
lejano. La buena acogida de estas tres historias protagonizadas por algunos de
los villanos más famosos del murciélago provocó que Loeb y Sale pudieran subir
de nivel y comenzar un proyecto aun más ambicioso. Daba comienzo el largo
Halloween en Gotham.
Carmine "El Romano" Falcone, claramente inspirado en El padrino. |
Con la recuperación de ambos mafiosos como cabezas visibles del cartel, se
pretendía representar una Gotham City en al que todavía reinaba el crimen
convencional, ese que Bruce juró erradicar cuando sus padres murieron, pero a
su vez sirve para mostrar cómo, poco a poco, los denominados “engendros” (los
clásicos súpervillanos) irán haciéndose con el control de la ciudad.
El argumento nos sitúa, como ya hemos dicho, en los primeros años
operativos de Batman, en esos en los que todavía no tenía un gran apoyo. No
obstante, incluso antes de que James
Gordon pudiera confiar en él, hubo un hombre que trabajó desde las sombras
al lado del caballero oscuro desde prácticamente el principio. No, no hablamos
del bueno de Alfred, sino del fiscal del distrito Harvey Dent. Harvey, apodado “Apollo” en la facultad por su hermoso
rostro y sus buenas formas, era un brillante defensor de la ley y del orden,
así como una persona de entera confianza. De forma clandestina colaboró con
Batman en sus primeros años, aun arriesgo de ser encerrado por colaborar con un
lunático disfrazado.
El tiempo pasó y el nombre de Batman pasó de ser un rumor a estar en boca
de todos. Pero mientras la fama del hombre murciélago aumentaba, así como sus
victorias, también aparecían un poderoso número de enemigos, cada cual más
peligroso que el anterior. Es entonces cuando tres hombres hacen un juramento en
lo alto de la comisaría, es entonces cuando comienzan a cambiar las cosas. El
capitán Gordon, el fiscal del distrito Dent y el murciélago nocturno harán la promesa de librar a Gotham de la
corrupción sin exceder nunca los límites legales, sin sobrepasar una
auto-impuesta línea que les separa y diferencia del enemigo, sin romper ese
triángulo de fraternidad que les une por un bien común: liberar a la ciudad del
veneno que la corroe por dentro.
Festivo comienza el largo Halloween... |
Y así Loeb firma uno de los mejores
guiones que el murciélago gótico ha recibido en toda su historia. Con una narrativa excelente y un modo de
llevar la historia envidiable se nos presenta una trama perfectamente hilada, de proporciones épicas, en la que harán
acto de presencia todo el elenco de aliados y enemigos de Batman. Desde el Joker
hasta Hiedra Venenosa, pasando por Solomon Grundy y terminando en Enigma
(quizás el único personaje un pelín desaprovechado, o por lo menos esa siempre
ha sido mi impresión…) todo el elenco de villanos clásicos de Batman se dan
cita en este largo Halloween. Pero no solo de villanos vive esta novela
gráfica, no, ¿qué sería del héroe sin sus aliados? Pues bien, aquí Bruce cuenta con
los mejores, con un Jim Gordon a la altura del de Año uno y con un Alfred que, a pesar de aparecer poquito, llena la
viñeta cada vez que hace acto de presencia.
El segundo es, como no podía ser de otra manera, Harvey Dent. Todo el mundo sabrá (y sino no sigas leyendo)
[SPOILER] que El largo Halloween
supone el “año uno” de Dos Caras ya
que asistiremos impotentes a la caída de Dent en la locura. Este factor, que a
priori parece en un segundo plano durante la obra, se torna en uno de los
puntos de inflexión dentro del universo del hombre murciélago ya que la pérdida
de Harvey y el nacimiento de Dos Caras supondrá uno de los mayores palos que
Batman recibirá y que más tocado le dejará, hasta tal punto que la confianza en
sus aliados se verá truncada en el futuro.
Mucho se ha hablado sobre el final de la obra en el que Dent se entrega
voluntariamente a la policía. Mucha gente opina que Loeb no supo plasmar la
locura de Harvey, yo personalmente creo que, aunque siempre esté oculto y
enterrado en las sombras, Harv siempre reside dentro de Dos Caras y que al
final de El largo Halloween todavía
no ha desaparecido entre toda la locura dual que en el futuro tanto
le corroerá y corromperá, creo que todavía tiene un grado de cordura y de
voluntad para terminar de cumplir su promesa original. Bien es cierto que esta
obra no es la primera narración de cómo nace Dos Caras, sino que ya se había
hecho con gran maestría en un especial anual de 1990 llamado El
ojo del observador. En él se narra de un modo más psicológico los
motivos por los que nace Dos Caras y desaparece Dent, es más, en El largo Halloween se dejan entrever
dichos motivos (la moneda, el padre de Harvey…), es cierto que nunca se llegan
a decir directamente pero quedan ahí para que el lector ate cabos y una piezas.
Si bien la fama han hecho que El largo
Halloween sea considerado el verdadero origen de Dos Caras, El ojo del observador es una obra
imprescindible dentro del universo de Batman y que, si se lee, sirve de
complemento perfecto a la creación de uno de los mejores villanos del caballero
de Gotham.
El tercer personaje que me gustaría destacar es Selina Kyle,
más conocida como Catwoman. Selina
siempre me ha parecido un personaje muy interesante, más que nada porque no
puede ser catalogada como enemigo de Batman (a pesar de que han tenido sus
roces) ni es al 100% su aliada (aunque colaboren en más de una ocasión). En
este largo Halloween Bruce
y Selina, Batman y Catwoman, llevarán una relación tan interesante como
turbulenta, cosa que Jeph siempre ha sabido tratar muy bien, es más, siempre es
un placer ver como Jeph Loeb da trato a Selina y su relación con el caballero
oscuro.
Pero esta obra maestra no es sólo obra de Loeb, para nada, pues El
largo Halloween no sería nada sin el gran dibujo de Tim Sale. Si bien
al principio el dibujo de Sale no me terminaba de convencer, hoy día puedo
asegurar que esta obra no sería lo mismo sin él. Con un gran parecido más a lo cartoon que a lo realista (como bien
podría ser Batman: La serie animada)
y con unos contrastes muy marcados de claroscuros y colores, Sale ofrece un
dibujo de gran calidad con su distintivo toque característico (los dibujos de
Sale son muy fáciles de diferenciar del resto, quizás eso le haga tan especial).
Mención especial merecen las portadas de esta obra. Las caratulas que
inauguran cada capítulo son geniales y combinan a la perfección la simpleza con
una composición original y cargada de simbolismo (más de uno habrá jugado a
buscar los murciélagos en ellas). De estas únicamente desmerece la portada del
capítulo 12, El día del trabajo,
portada que, dicho sea de paso, nunca terminó de convencer ni al propio dúo
creativo. No obstante todo ello queda compensado con creces con la espectacular
portada de la edición absolute (la que ilustra esta reseña) que es, a título
personal, una de mis portadas favoritas.
Batman: El largo Halloween es una obra para leer,
disfrutar y releer cada cierto tiempo. Su genial y envolvente narrativa, su
espectacular y compleja trama y sus grandes y carismáticos personajes no hacen
sino convertirla en una obra de obligada lectura tanto para fans del murciélago
como para todo amante de los comics en general, pues pocas, muy pocas veces se
tiene la oportunidad de disfrutar de una obra tan bien hecha como la que Sale y
Loeb nos han brindado, una obra tras la cual nada volverá a ser como antes.
Lo peor:
- La portada del tomo 12 no está a la altura del resto.
- La batalla final se resuelve de forma bastante rápida para lo que parece a priori, está justificado argumentalmente, pero sigue resultando "demasiado facil" bajo mi punto de vista.
Lo mejor:
- Es una obra sumamente sólida, completa y compleja. Es una obra maestra imprescindible que todo el mundo debería leer alguna vez en su vida.
- El tandem Jeph Loeb y Tim Sale: probablemente el mejor dúo que ha representado las aventuras de Batman hasta la fecha.
- Lo interesante y bien narrada que está la relación Batman-Catwoman.
- Las portadas de toda la colección son sublimes y están muy bien diseñadas.
La frase:
El comic está plagado de grandes frases y citas, pero cuando lo terminas de leer solo una, y de un personaje en concreto, viene a tu mente. Sin lugar a dudas la frase de El largo Halloween es:
"Creo en Harvey Dent."
Gilda Dent
Antes de nada, tengo que decir que me ha gustado mucho la reseña. Hace bastante tiempo que me leí El Largo Halloween y me ha venido muy bien para refrescar la obra en mi memoria. Sacaron una edición nueva hace poco que tenía muy buena pinta, por cierto.
ResponderEliminarDicho esto, tenemos la misma polémica que en otra de tus anteriores reseñas. Utilizas los términos serio, adulto y oscuro como si fuesen sinónimos y yo no estoy de acuerto con eso. All Star Superman, por ejemplo, me parece un cómic muy serio y muy adulto, pero no es nada oscuro. Si bien es cierto que la influencia de Año Uno y El Regreso del Caballero Oscuro convirtieron a Batman en un personaje "oscuro", esa "oscuridad" no me parece un elemento definitorio del personaje (y tampoco un elemento necesario para hacer historias serias y adultas).
Por otro lado, coincido en la valoración que haces de El Largo Halloween, pero personalmente añadiría más peso a la contribución de Tim Sale que a la de Jeph Loeb. Esta pareja creativa funciona realmente bien, pero los guiones de Jeph Loeb para otros dibujantes siempre me han parecido bastante flojos.
Por cierto, ¿para cuando la reseña de Victoria Oscura? :)
Muchas gracias Okubo, siempre es un placer ver tus comentarios :)
EliminarYo tengo la versión antigua (la que tiene la portada azul) de El largo Halloween, pero de Victoria oscura tengo la versión nueva y la verdad es que no están nada mal.
Respecto a lo que dices de cómo uso el término "oscuridad" no creo que lo use mal, lo que creo es que lo interpretas como que lo uso haciendo de sinónimo de seriedad e historias adultas, y no, para nada, lo que intento decir es que frente al colorido que Batman solía tener antes El regreso del caballero oscuro lo convirtió todo un poco más oscuro, con menos colores... que para algo es el señor de la noche. Pero bueno, eso ya lo hablamos más tranquilamente en otro momento con una cerveza ;)
Muchas gracias por tus opiniones (en serio) y estate atento al blog, que en breve (espero) que haya más cositas interesantes :)